Durante 17 años el arquitecto y paisajista suizo Enzo Enea se dio a la tarea de coleccionar alrededor de 2,000 arboles. Su fascinación por ellos lo llevo a plantarlos en un gran patio de dos hectáreas de un antiguo monasterio del siglo XIV para crear el museo de los arboles, en la localidad de Rapperswill-Jona, a las orillas del lago Zurich, en Suiza. Junto a los arboles Enea coloco muros de piedra arenisca que les brindan un dramático y hermoso contraste. Su obra se construyo con el apoyo del despacho estadounidense Oppenheim Architechture-Design. Ahí se pueden encontrar 22 especies distintas con las formas mas variadas, edades que van de los 50 a los 130 años y alturas de 4.5 a 12 metro.
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