La vida útil de toda edificación depende de que también se conserve de las inclemencias del tiempo (calor, frio, lluvia y en algunos lugares nieve) estos son factores que causan a la larga un gran deterioro en paredes y losas, el problema se agrava aun mas al filtrarse agua por entre el concreto. Este problema es de los más comunes en losas, que a diferencia de las paredes se encuentran en posición horizontal, lo que hace que el agua escurra con mayor dificultad y peor aun si al momento de la construcción no se le dio una adecuada pendiente. Esto en conjunto ocasiona que el agua se encharque y que se presenten filtraciones.
En el mercado se encuentra una gran gama de impermeabilizantes que ayudan a erradicar este problema y a prologar la vida útil de su vivienda. En si un impermeabilizante es básicamente una sustancia que detiene el agua.
A la hora de elegir un impermeabilizante para una losa, se debe tomar en cuenta el tránsito que soportará, ya que la fricción puede dañar la película. En losas de techo, una opción muy conveniente es el manto asfáltico, formado por una mezcla de asfalto con una membrana granulada, cuyo grosor dependerá de ese tránsito. Este tipo de material proporciona una impermeabilización fuerte y duradera, ya que posee excelentes propiedades de flexibilidad, resistencia a la deformación y recuperación elástica.
Primeramente se aplica una imprimación de emulsión asfáltica, que funciona como adherente, para luego calentar el manto asfaltico, que proveerá una adherencia adecuada a la losa. Este tipo de impermeabilizante debe ser aplicado por especialistas, ya que se requiere de herramientas y equipo especializado.
En losas de techo en las que el tránsito será mínimo o nulo se pueden utilizar impermeabilizantes acrílicos, los cuales brindan una adecuada protección a la superficie hasta por 6 años.
En el mercado se encuentra una gran gama de impermeabilizantes que ayudan a erradicar este problema y a prologar la vida útil de su vivienda. En si un impermeabilizante es básicamente una sustancia que detiene el agua.
A la hora de elegir un impermeabilizante para una losa, se debe tomar en cuenta el tránsito que soportará, ya que la fricción puede dañar la película. En losas de techo, una opción muy conveniente es el manto asfáltico, formado por una mezcla de asfalto con una membrana granulada, cuyo grosor dependerá de ese tránsito. Este tipo de material proporciona una impermeabilización fuerte y duradera, ya que posee excelentes propiedades de flexibilidad, resistencia a la deformación y recuperación elástica.
Primeramente se aplica una imprimación de emulsión asfáltica, que funciona como adherente, para luego calentar el manto asfaltico, que proveerá una adherencia adecuada a la losa. Este tipo de impermeabilizante debe ser aplicado por especialistas, ya que se requiere de herramientas y equipo especializado.
En losas de techo en las que el tránsito será mínimo o nulo se pueden utilizar impermeabilizantes acrílicos, los cuales brindan una adecuada protección a la superficie hasta por 6 años.
Las ventajas que engloban estos impermeabilizantes son:
• Fácil aplicación, alta elasticidad.
• Excelente adherencia.
• Resistencia a la intemperie.
• Se aplica sobre cualquier superficie.
• Secado y puesta servicio rápido.